¿Por qué no aquí? ¿Por qué no ahora?
¿Acaso hay mejor lugar para soñar que París?
Estoy enamorada de París, la primera
vez que viajé a París fue con mis padres a los 18 años en Diciembre, no paró de
llover en todo el fin de semana y hacía tanto frío que no podías estar en la
calle más de tres horas seguidas sin entrar en una cafetería, sin embargo
recuerdo que pensé que nunca volvería a ver una ciudad tan bonita.
Dormimos en un hotel en el distrito de les Invalides y sólo entrar por la puerta
te trasladabas a los felices años 20, decoración Art decó, muebles lacados, tapicerías
en colores claros , borlas de flecos doradas e inmensas cortinas de terciopelo.
Desde la habitación se podía ver La torre Eiffel iluminada y cuando la
miras parece que te quiere transportar a otro mundo como si fueras Owen Wilson
en la película Midnight in Paris.
